Reír hasta las horas negras

La sesión del lunes, 11 de mayo, la dedicamos al poeta salvadoreño Roque Dalton, asesinado hace cuarenta años
Elena Poniatowska afirmó de él: "nadie menos solemne que Roque Dalton, nadie más capaz de hacer reír hasta las horas negras, más dispuesto a aventarse a pecho abierto contra el peligro, nadie más accidentado"



Mario Benedetti le dedicó un poema:

Llegaste temprano al buen humor
al amor cantado
al amor decantado

llegaste temprano
al ron fraterno
a las revoluciones

cada vez que te arrancaban del mundo
no había calabozo que te viniera bien
asomabas el alma por entre los barrotes
y no bien los barrotes se aflojaban turbados
aprovechabas para librar el cuerpo

usabas la metáfora ganzúa
para abrir los cerrojos y los odios
con la urgencia inconsolable de quien quiere
regresar al asombro de los libres

le tenías ojeriza a lo prohibido
a las desgarraduras para ínfula y orquesta
al dedo admonitorio de algún colega exento
algún apócrito buen samaritano
que desde europa te quería enseñar
a ser un buen latinoamericano

le tenías ojeriza a la pureza
porque sabías cómo somos de impuros
cómo mezclamos sueños y vigilia
cómo nos pesan la razón y el riesgo

por suerte eras impuro
evadido de cárceles y cepos
no de responsabilidades y otros goces
impuro como un poeta
que eso eras
además de tantas otras cosas

ahora recorro tramo a tramo
nuestros muchos acuerdos
y también nuestros pocos desacuerdos
y siento que nos quedan diálogos inconclusos
recíprocas preguntas nunca dichas
malentendidos y bienentendidos
que no podremos barajar de nuevo

pero todo vuelve a adquirir su sentido
si recuerdo tus ojos de muchacho
que eran casi un abrazo casi un dogma

el hecho es que llegaste
temprano al buen humor
al amor cantando
al amor decantado
al ron fraterno
a las revoluciones
pero sobre todo llegaste temprano
demasiado temprano
a una muerte que no era la tuya
y que a esta altura no sabrá que hacer
con
tanta
vida.

Y Daniel Viglietti hizo lo propio con una canción.


Propusimos como tarea escribir un texto siguiendo la pauta del poema "Pedimos" de Roque Dalton:

Pedimos que nos amen, que nos dejen amar,
pedimos que nos hagan quedarnos solos atados a los ángeles,
que no dejen testigos desde ahora
esperando la imagen
honda de nuestras lágrimas;
pedimos que no insistan en herirnos el lugar de la ira,
pedimos que las esposas doren el blanco pan
y nos conviden a la mesa del júbilo,
que los muchachos y las muchachas
recuesten su frescura de musicales líquenes
sobre la llamarada que nos nació en las voces,
pedimos la sonrisa
desde nuestra lastimadura más presente
y el escudo fraterno desde el opaco miedo
que nos podría suceder;
pedimos el abrazo,
el ambulante nido para la desangrada palabra
que un día descubrimos y que venimos ahora a repartir….


Y estos son los trabajos de algunos de los participantes en el taller de escritura:


Pedimos
Pedimos a quien corresponda
que hagan mujeres a los hombres,
y si con esto no les bastan,
que les den su propio trato.

Miguel Ángel Pegarz 


Pedimos (Falso Haiku)

sólo pedimos
un poco de silencio,
que ruido sobra.

Miguel Ángel Pegarz 


(Los yo) pedimos

Pedimos que no nos hagan entrar en ningún saco
previamente lleno de ruedas de molino.
Pedimos que estar de acuerdo en algo con unos
no suponga ponernos enemigos de los otros.
Pedimos que sentir simpatía por algo que dicen los otros
no nos gane el odio de los unos.

Pedimos que nos dejéis ignoraros en paz,
sin que unos y otros nos llamen ignorantes.

Pedimos que nos dejen pedir a cada uno.
Pedimos que nos dejen y valoren
decir “Pido”

Miguel Ángel Pegarz


¡Pedimos!

- Que la sociedad sea mas justa, con topes a la riqueza personal.
- Que los corruptos vayan a la cárcel y devuelvan lo robado.
- Que los jueces puedan legislar con libertad y aplicar la ley con justicia
- Que los países ricos ayuden a los mas desfavorecidos a salir de la pobreza
- Que el amor entre las personas haga mas fácil la vida diaria.
- Que no exista odio entre los países, por raza , religión. etc.
- Que se paren todas las guerras y se controle el armamento mundial.
- Que se invierta en investigación, en sanidad, educación
- Que se disminuya la contaminación y se proteja los mares.
- Que desaparezcan del planeta todos los indeseables.
- Que la sociedad proteja a los discapacitados, ancianos, etc.
- Que toda la gente tenga un trabajo digno, sin ningún tipo de explotación, un salario justo y una vivienda.

P.D:

(Pedimos: amigos, canciones bonitas, una sonrisa, un poema, un libro, una caña, un pincho de tortilla, etc)

Luis Iglesias


Pedimos amor sirviendo indiferencia
pedimos vida sana con el cubata y cigarro en la mano
pedimos comunicación mientras utilizamos el whattsapp
pedimos cambio desde el sofá del salón
pedimos el cese de la corrupción pagando sin iva
pedimos calidad cinematográfica pero vamos a ver superhéroes al cine
pedimos cultura mientras apretamos el número cinco del mando del televisor
pedimos a ellos en vez de pedirnos a nosotros.

Andrés F. Santos


Pedimos

Pido que me amen, que se pueda amar,
que en tus ojos llegue lo correcto, la verdad.
Por encima de la mentira, de la falsedad, de las injusticias.
Pido que el dolor pare, que cuando te marches no me duela, no lo sienta.
Pido que se proteja a las tortugas, que son inofensivas y tengo miedo que desaparezcan.
Pido despertarme cada mañana, todavía teniéndote a mi lado.
Pedimos que acabe el hambre, que no haya guerras, que el dolor cese.
Pedimos que se respete el caudal de los ríos y que no se maten más lobos ibéricos.
Pido que la naturaleza sea sabia, que pase y no vuelva y que no oscurezca.
Pedimos días más largos, que no se acaben, que permanezcan.
Pedimos ampliación de salario por jornada trabajada.
Menos trabajo, más auxiliares.
Pido el deseo de poder seguir amándote, cada día, cada hora, cada momento del día, cada lugar....
Pido de verdad amarte y nunca perderte.

Iria Costa


Pedimos

La palabra desnuda,
el pensamiento azul,
los sentimientos perdidos,
la inquietud de amar,
silencios de cristal,
huellas de amor
en el camino de las horas,
desnudez del recuerdo,
risa en la mirada,
momentos de la mente
vestidos de luz
bajo las sombras de la vida.

Sofía Montero


Pedimos

Pedimos justicia y honestidad
Que las manos acaricien
Los ojos admiren
Los labios besen
Pedimos decencia y educación
Escuchar el silencio
Rondar la luna
Rozar el mar
Pedimos verdad y paz
Suspirar con el viento
Caer con la lluvia
Mirar el cielo
Pedimos cordura y sosiego
Traducir la noche
Adorar el día
Teñir la vida de un color azul
Pedimos poesía y música
Soñar palabras
Enredar con las notas perdidas de un piano
Rascar el fuego
Pedimos luz
Y un techo
Y un trozo de pan
Y un poco de agua
Y amor
Un pedazo de amor
Solo un pedacito de amor
Pedimos aplacar la sed
Y saciar el hambre
Y mimar la naturaleza que no se acabe

Vicente M. Martín


Pedimos…
Homenaje a Roque Dalton, tras 40 años de su muerte.

Pedimos amor y añoramos la riqueza del prójimo.
Pedimos dignidad y obesos pasamos hambre.
Pedimos agua y nos violan en mitad del desierto.
Pedimos democracia y nos otorgan vacía una libertad de injusticias.
Pedimos cal para las casas y nos la dan viva para nuestros muertos.
Pedimos una vida placentera y nos estresamos hasta agonizar en soledad.
Pedimos que nos comprendan y no somos capaces de sacar al niño que llevamos dentro.
No somos ni seremos aquellos otros, los salvajes que matan y mueren; sin pedir por ellos mismos.
Y si sólo pedimos pan, nos sacan el dinero.

Chema García


Por pedir

Pedimos claridad sin recovecos ni manos en el cofre ni sombras en la oscuridad ni barro en los cristales
Pedimos que no concilien borregos con las cabezas juntas que devanen a honestos y urdan estratagemas
Pedimos palabras sinceras que no halaguen ni al tonto ni al soñador aunque pique el rubor y duela la última vez
Pedimos renovación diaria, tender el aura lejos y no mirarse el ombligo o sentarse en el nido a esperar
Pedimos un No a la dictadura de la razón y un Sí a la duda
Pedimos equivocarnos, saber esperar, asertividad a carta descubierta y reírme de mí
Pedimos la mano con fuerza que detenga al interés propio, lance lejos al egoísmo y aplauda a la solidaridad
Pedimos pelear por todos con la honradez entre los dedos y entre los dientes
Pedimos no temer a no fracasar
Pedimos no tener para comer algún día para sentir el decaimiento que sufren los que no tuvieron suerte
Pedimos ser diferentes, mostrarlo y aceptarlos, el estado de gracia, la poesía, mirarnos las propias vísceras de vez en cuando
Pedimos que nos quieran raros, que nos quieran verdes, que nos quieran aunque seamos patos feos

Antonia Oliva


Pido en singular, no pretendo que nadie se meta conmigo en este charco, la inmediata dimisión de este Dios con gran ojo contraplano y cortado al medio, del que solo escucho los crujidos.La solicito por la continua dejación de funciones.Que afán , tan grotesco, el suyo al crear, nada menos,a su imagen y semejanza el genero humano para dejarlo,insensible e inmisericorde, a la deriva en manos de los crueles jinetes de la Apocalipsis y sus modernos compinches de fechorías.

¿A quién sino a El exigirle responsabilidades?, ya que se declara poseedor de nuestros títulos de propiedad.

Pido así mismo, también en singular , que el Cielo sea puesto en “almoneda”y que lo recaudado se reparta entre todos los parias y desheredados de la Tierra.

Por último pido que , dimitido o destituido, sea exiliado y... : ¡ Que conozca el infierno de la tierra¡

Pedimos un Mundo Nuevo, recién parido, donde la palabra, la poesía reafirmen la importancia y unicidad de todos los seres humanos.

Pedimos un arco iris, en el que los colores recuperen su significado y ....:donde:

El azul no viva a las afueras del mar...

El verde sea el color de los estanques con algas ,nenúfares y renacuajos....

El amarillo sea el color del pos-it donde digo “tequiero”..

El índigo tenga fuerzas para ser “más azules “ y púrpura que restaure Vidas y no Ángeles....

El rojo, en la arteria, sangre que “bulle” y ayuda a limpiar el aire viejo que , se estanca en los pulmones y nos ahoga.......

El naranja el color del recuerdo , de la tarde que pasa , de tu otra mitad....

Y el violeta de nombre a hermosas muchachas y color de mentes libres de dogmas establecidos y opresores .El color de la gente que ama la magia y abre su corazón .

Pedimos la abolición inmediata de las “Penas de Muerte”.

De la que ejercen Estados y Tribunales en nombre de una malentendida justicia. ¡Que justicia puede hallarse en un acto que cercena la Vida.!

Y , también, la de esa otra ejercida en “modo diferido” por el llamado Primer Mundo , su Clase dirigente y los estamentos y gobiernos “títere” que condenan a los pobres , parias y pueblos desheredados al hambre, ,enfermedad,explotación, esclavitud, desarraigo, incultura , falta de libertades y derechos , incluso los más elementales. Dotándoles, eso si , de Carta de Naturaleza de Ciudadanos del Mundo desposeídos de todo excepto de la extrema pobreza y miseria.,

Fernando de Castro


Pedimos

Pedimos saber más cuando aún lucimos granos
y ser más jóvenes cuando, por viejos, sabemos más.

Pedimos que el sol salga por occidente
y que la riqueza se extienda de sur a norte,
sea solo por azar]

Pedimos que la arena sacie la sed del desierto
y que encienda la luz la oscuridad

Pedimos para que, en este mundo de contradicciones,
tú y yo, epítome de la paradoja,
podamos besarnos en el mismo idioma,
aunque sigamos sin entendernos.

Juan José Nieto


Pido unos ojos sin banderas y un ombligo sin corona
Una piel siempre virgen y un corazón de harina
Una lengua sin espadas y unos oídos sordos al grito de la corneta: Odio
Eco de un caudillo que lidera el enjambre. Ácaro que pudre la colmena.
Capitán del cementerio que nunca se cierra.

Pido unas manos dadivosas y unos pies que caminen sin que les guíen mapas o
estrellas
Danzar sobre mis huellas. No dejar huella.
Ser mi casa. Un hogar sin puertas.
Recibir alegrías. Hospedar tristezas.
Saber que todo pasa. Amar sin exigencias.

Pido intuir la vida en un charco de sangre
Respirar el duelo sin mutilar la inocencia
Conocer el dolor. Eludir la amagura. Abonar los jardines. Permitir que florezcan
Mezclar los aromas. Saborear el perfume de la diferencia.
Disfrutar la belleza sin ansias de poseerla. Morir sin marchitarme

Pido que el brillo del oro de paso al resplandor del trigo
Que los hórreos se desborden. Que los graneros se abran
Que la espiga crezca. Que se vista de hogaza en una mesa que hable todas las lenguas
Que el pan no se cubra de moho en la bolsa del poder. Que el miedo no mande.

Que la araña no teja el lamento del hambre y un mundo indiferente, callé.

Pido ver en el niño al abuelo, y en el abuelo el chiquillo que aún sube a los árboles.
No olvidar que la madre es hija, que la hija puede ser abuela y madre.
Entender que una forma distinta no nos vuelve desiguales.
Reconocer en el otro mis gozos y mis pesares.
Dar la mano al caído sin temer ahogarme.

Pido entregarme al misterio que renace cada instante
Conocer el ahora limpio. Ser eternidad fugaz
Prescindir de las reglas de los que llaman maestros
Omitir los dictados de los que llaman truhanes.
Dibujar mi compás entre acordes dispares.

Pido asumir el error sin enfadarme
Pedir perdón sin que la mirada baje
Perdonar sin humillar a nadie

Convertir las cicatrices en lecciones suaves

Hacer de las consecuencias, causas: llaves de nuevas naves.

Pido ser yo
Pido ser todos.
Pido ser nadie.
Pido jugar siempre entre elefantes y corales
Pido que cuando la mar ruja con fuerza, mis sueños me den coraje.

Ana Isabel Fariña


A quien corresponda
PLANETA TIERRA, mayo de 2015

Departamento de Gestión de deseos
C/ de la Misericordia, nº de la Esperanza
25015 Cielo

A quien corresponda


Estimado Sr. Nuestro:

Quien suscribe, y en representación de la población mundial, se dirige a usted, sin ánimo de importunarle, para manifestarle el malestar generalizado que están experimentando los habitantes del Planeta Tierra debido a la mala gestión realizada por el propio ser humano, poblador de esta morada.

Queremos dejar constancia de que, de unos siglos a esta parte, tanto la sociedad como la especie humana está degenerando a unos seres monstruosos como consecuencia del egoísmo, la ambición y el poder.

Muchos de nosotros, si pudiéramos, estaríamos decididos a abandonar este Planeta, si la situación no volviese a su estado inicial o, en su defecto, mejorara. Por todo ello, solicitamos un pronto cumplimiento de mejora de la condición humana y del Mundo, ambas creaciones atribuidas desde el principio de los tiempos a usted y descuidadas, como hemos podido observar, tras su invención.

Por lo tanto, humildemente pedimos:

- Que los calificativos más arriba asignados a la especie humana sean sustituidos por otros como la solidaridad o la modestia.
- Que se derrumben las fronteras.
- Que se acabe con los prejuicios de sexo, raza, religión o estatus social.
- Que desaparezca la corrupción y los que la practican.
- Que la justicia funcione independientemente de los colores políticos.
- Que no exista la palabra “mentira” en ningún diccionario.
- Que todos los países sean “hiper”desarrollados y vivan en igualdad de condiciones.
- Que nadie tenga que sufrir el hambre y la miseria.
- Que los conflictos se solucionen con palabras y no con armas.
- Que no sepamos de más muertos enterrados en fosas comunes.
- Que la riqueza sólo sea espiritual.
- Que luchemos conjuntamente por salvar este Planeta donde nos ha tocado vivir.

Y por último, y no menos importante, si esta solicitud no fuera escuchada con la atención que se merece, pedimos la capacidad de reírnos incluso de los males, y de ser felices a pesar de todo.

Sin otro particular y a la espera de una satisfactoria resolución por su parte, se despide atentamente

Petita Desideria

Toñi Martín del Rey

Vía oral. La tradición popular y el rumor

La sesión del lunes, 4 de mayo, la dedicamos al modo en que se transmite la información de boca en boca, y sobre todo al rumor y a la tradición oral.
Hablamos de los libros "Siete llaves de cuento" y "La aventura de oír" y leímos algunos textos.



Dejamos aquí uno de ellos, de Hans Christian Andersen:

“De noche, cuando los niños están sentados muy seriecitos a la mesa o en sus banquetas, llega Ole Cierraojos; sube en silencio la escalera porque no lleva más que medias, abre muy despacio la puerta y, ¡zas!, salpica de dulce de leche los ojos de los niños, sólo una pizca, pero lo bastante para que no puedan mantenerlos abiertos y por lo tanto no puedan verle; se esconde detrás de ellos y les sopla suavemente en la nuca, para que les pese la cabeza, claro que sin hacerles daño, porque Ole Cierraojos sólo busca su bien; lo que quiere es que se estén quietos para que él les cuente cuentos.
Cuando los niños por fin duermen, Ole Cierraojos se sienta en la cama. Está muy bien vestido, su traje es de seda, pero no es posible decir de qué color, porque tiene brillos verdes, rojos y azules, según se mueve; bajo cada brazo lleva un paraguas, uno con estampas, que abre sobre los niños  buenos y entonces sueñan toda la noche las más encantadoras historias, y otro paraguas en el que no hay nada, que abre sobre los niños malos, que duermen tan profundamente que por la mañana, cuando se despiertan, no han soñado nada.” 

Propusimos como tarea convertir un cuento en noticia. Para ello indicamos unas pautas:
Elige un cuento. Selecciona alguna de las acciones del cuento que vas a convertir en noticia.
Redacta la información (subraya o destaca las respuestas a las preguntas principales, dónde, cuándo, quién...) ¿Tienes algún testigo? ¿Qué ha declarado?
Da forma a la noticia. Ten en cuenta la estructura de dicha noticia (antetítulo, titular, subtítulo, entradilla y cuerpo).
Redacta un titular que sea escueto pero que trasmita lo principal de la noticia. Exprésate de forma objetiva, no hagas valoraciones de la noticia.

Estos son algunos de los trabajos presentados:


Feliz regreso a casa de los hermanos desaparecidos

Tras tres semanas de desaparición los dos hermanos regresan a su hogar sanos y salvos
La pasada madrugada, los dos hermanos alemanes, Hansel y Gretel, de ocho y cinco años respectivamente, desaparecidos desde el pasado día del padre, regresaron a su hogar situado en la urbanización madrileña de la Moraleja donde vivían junto a su padre y la compañera sentimental de este.

Los niños desaparecieron el pasado 19 de marzo cuando se dirigían a coger, por primera vez solos, el autobús que los trasladaría al campeonato infantil de tenis. El padre, quien tuvo que trabajar ese día, había encargado a su pareja que los acercara hasta el lugar donde tendría lugar el torneo. Sin embargo, esta, alegando una fuerte migraña, les pidió a los niños que fueran en transporte público ya que ella no se encontraba bien.
Según el testimonio de Hansel, cuando se dirigían a la parada, una guapa y elegante mujer, se acercó a ellos y les dijo que les acercaría al recinto, junto a sus sobrinos, que también participaban en el evento. Ellos, confiados, subieron al coche y, tras recibir varias barritas de chocolate, fueron trasladados a una casa cercana donde fueron encerrados en una habitación llena de chucherías.

Durante estas tres semanas de cautiverio, los pequeños sólo se alimentaron de golosinas, lo cual empezó a cansar a los hermanos quienes han declarado su deseo de comer un plato de espinacas y pescado al vapor.

La secuestradora, antigua compañera del padre y, al parecer, con problemas psiquiátricos, deseaba vengarse de este por haberla abandonado tras engañarla con dulces palabras. Según han declarado los niños, repitiendo las palabras de esta, sólo quería que sus hijos recibieran las mismas dulces atenciones que había vivido ella durante años para luego abandonarlos sin ningún miramiento.

La policía fue alertada por el quiosquero de la zona residencial, quien empezó a sospechar de su vecina:

- “Me extrañó que comprara todos los días tal cantidad de dulces, ya que siempre me había manifestado su negativa de incluir este tipo de productos en la dieta infantil. Ella no tenía hijos y tampoco engordaba un gramo a pesar de las calorías diarias adquiridas. La compra desorbitada de chuches coincidió con la fecha de la desaparición de los hermanos, lo que me hizo atar cabos”.

Los vecinos, quienes colaboraron en las tareas de búsqueda de los niños, se sienten aliviados por la liberación y consternados por el secuestro: “Es una zona muy tranquila, donde nunca pasa nada”.

La presunta secuestradora se encuentra detenida en comisaría a la espera de pasar a disposición judicial.

Toñi Martín del Rey


El misterio de la Filarmónica crece.
No hay pistas.
La epidemia progresa.
El estado actual es de máxima alerta.


Esta confirmado, la Sala Dorada de la Musikverein sólo fué el origen. Los asistentes a la gala Vienesa los primeros en manifestar clínica. Millones de telespectadores y radio oyentes también se han visto afectados. Hoy, 5 de enero, en el instituto Richellieu, los escasos profesionales de la salud no contaminados, continúan recluidos. Intentan encontrar una explicación lógica. Solo ellos pueden revertir los hechos y restablecer el orden. Los polideportivos, los ayuntamientos y las iglesias habilitadas como refugio, comienzan a estar desabastecidos. Nadie se atreve a abandonarlos. La compasión es un lujo. Cientos y miles de personas aporrean sus puertas con la intención de encontrar un cobijo. El miedo al contagio las deja fuera. De confirmarse las sospechas, todo lugar abierto es un peligro. Cualquier persona sin orejeras de acero un vector de riesgo. Si la plaga viaja con el eco del aire, el tiempo hasta ahora conocido, puede pasar a ser un recuerdo.

Según fuentes consultadas por esta redacción, el responsable es un tal Arturo, un adolescente de apenas trece años, que sin poseer conocimientos musicales, interrumpió el tradicional "concierto de los valses" con una travesera de cristal. Sin saberlo, el jovencísimo pífano invocó a la que ya se conoce como "la bruma de Avalón". El recinto, donde intérpretes y público saboreaban los últimos compases de un Danubio Azul, vio como la pieza clásica era abortada por una melodía viral. El prestigioso Zubin Mehta cedió la batuta a una flauta dulce. No hubo resistencia de violines.

Cuando la niebla se disipó, la Filarmónica había desaparecido. Su lugar lo ocupaba un espejo de obsidiana. Una puerta volcánica y minúscula que se abría al ritmo de los acordes de un joven sin pretensiones. Personajes de fábula y héroes legendarios atravesaron su dintel sin esfuerzo. Hadas, duendes, elfos, brujas, ogros, príncipes y princesas; animales parlantes, enanitos, lámparas y alfombras voladoras -entre otros-, bailaron ante un auditorio perplejo durante horas. Cada uno de sus pasos fue una historia fascinante e irrepetible que se tejió sin guión.

Todos los testimonios recopilados hasta el momento coinciden. Un fuerte dolor de cabeza fue y es el preludio de unas náuseas incontrolables. El vómito su consecuencia inmediata. Cada arcada fue y es la madre de una o varias ratas del tamaño de un elefante. Salen por la boca con la misma rapidez que el rayo rasga la oscuridad. Una vez fuera, se convierten en polvo. Un frio solo comparable al desamparo mas absoluto penetra los huesos y la sangre. Dura unos instantes. La piel se vuelve trasparente. Los ojos pinceles sin verrugas. Después llega el calor y el color de unas flores que incitan al absurdo de una creencia sin fundamento: "Las ratas habitan las alcantarillas. Se pudren. Ignoran la luz de la fantasía"

Cuatro días después, una marea de soñadores amenaza los pilares de la tierra.

Se reconocen con facilidad.

Portan una espada de tejo a la que denomina "Exkalibur" -aseguran que con su roce se funde cualquier cadena- y reparten habichuelas -afirman que quien las siembra puede trepar por ellas y descubrir tesoros de valor incalculable-

El joven Arturo, que al ser requerido por la autoridad, se entregó sin oposición, continúa aislado.

Tras múltiples interrogatorios, la única declaración que ha realizado es tan desconcertante como lo sucedido en lo que va de año. "Me pinché con un huso y desperté".

Esperemos que esta noche, los reyes de oriente dejen bajo nuestros abetos, la paz de siempre, la salud y la bendición de la cordura.

Hamelin Zeitung
5 de Enero de 2015

Ana Isabel Fariña


"Compro arroz para vivir y flores para tener algo por lo que vivir"
La Cenicienta, detenida por aparcar en el carril bus.  
Agentes de movilidad retuvieron su carroza en una calle céntrica de la capital y mantuvieron con ella una agria disputa.

Eran las ocho de la tarde cuando en plena Gran Vía de la capital, tal y como nos han confirmado fuentes de la Policía Municipal, una carroza reluciente fue retenida por los agentes de movilidad por hallarse estacionada en pleno carril bus. Su dueña, una señora de cabello rubio que se hacía llamar Cenicienta, afirmó que solo había detenido su vehículo para comprobar el estado de su peinado en el cristal de una marquesina.

Requerida por la policía, testigos oculares nos afirman que, en un intento de huida, la Cenicienta golpeó una de las motos de los agentes y que, furiosa tras haber sido retenida de nuevo, profirió diversos improperios contra los agentes agitando sus brazos y señalando varias veces, de manera espasmódica, su reloj. “Es como si tuviera prisa”, comentó uno de los presentes.

La disputa se prolongó durante horas. Tanto tiempo pasó que a eso de la medianoche la lujosa carroza se transformó de súbito en una vulgar calabaza, hecho que aprovecharían los vecinos más humildes del barrio para hacerse con una porción con la que poder elaborar, al día siguiente, una suculenta crema. “Es la crisis, ¿saben?” se disculpaban mientras la Cenicienta, ahora vestida con unos trapos viejos, citaba a los agentes en el juzgado.

Juan José Nieto Lobato


El increíble rescate de una niña de las fauces de un lobo(Crónica desde la aldea de Lacerta, pedanía de Testameña, en pleno Bosque de Tortuondo)
El ocaso de los valles
Domingo 8 de mayo de 2016


Una niña de ocho años es encontrada junto con su abuela en el momento de ser devoradas por uno de los lobos reinsertados dentro del tan criticado Plan Especial de Reinserción de los mismos en las Sierras y Bosque de Tortuondo.

Una vez por semana esta niñita, Caperucita, nombre por el que todo el mundo conoce a la pequeña en su localidad natal, tenía que cruzar el bosque para llevarle provisiones a su abuelita, una simpática ancianita, aún autosuficiente, pero aquejada desde hacía pocos meses de una crisis de artrosis que dificultaba su normal desplazamiento.

Al parecer, los continuos controles de las fuerzas encargadas del seguimiento y vigilancia del susodicho Plan, habían despejado hace tiempo los temores de un posible ataque en la zona, al menos durante las horas más luminosas y centrales del día. Y la niña, acostumbrada ya a ese recorrido y aunque esta vez sola, no sintió en ningún momento miedo ni peligro, reafirmándose en los sabios consejos de su madre y llegando incluso a pararse en algún momento a recoger algunos frutos silvestres y para hacerle un ramo de flores a la abuela, según ella misma ha podido confirmarnos posteriormente.

El pasado lunes, dos de mayo, los tres integrantes de una patrulla del Seprona que estaba realizando trabajos de desbroce cerca del lugar conocido como el Molino de la Miagra, lugar en el que está situada la casa de la anciana, oyeron unos gritos agudos y desgarradores.

Alarmados, pero preparados también para atender situaciones inusitadas de emergencia, se acercaron rápidamente al lugar de los hechos, armados preventivamente de hoces,cuerdas y el correspondiente “walky-talky” de servicio.

El cuadro que apareció ante su vista no pudo ser más aterrador.

La enorme bestia, que según todos los indicios habría ya devorado a la ancianita, estaba a punto de deglutir completamente a la indefensa niña que se debatía agitando sus pequeñas manos, la única parte visible, entre las enormes fauces de dientes afiladísimos.

Ese empanzonamiento, como si de una gigantesca serpiente boa se tratara, pudo estar, afortunadamente, en el origen de su incapacidad para reaccionar como se espera de una bestia de tal naturaleza. Esa falta de reacción del animal facilitó el esfuerzo para atarla en primer lugar y para poder reducirla, siendo, asimismo, degollada de inmediato y poder extraerle a la mayor brevedad los dos pequeños cuerpos que ya ocupaban su estómago.

Felizmente rescatadas, si bien con claros síntomas de asfixia la primera que perdió el conocimiento desde un primer momento y con la preciosa capa roja hecha jirones la segunda, ya que, con toda seguridad, las prisas y la misma gula impidieron al lobo poder desvestirla del todo , ambas se encuentran ahora perfectamente, después de pasar las preceptivas setenta y dos horas de observación en el hospital “Pérez de la Noria” de nuestra capital.

El animal fue puesto a disposición del Instituto Anatómico Forense para su autopsia y posterior estudio porque esta violencia contra los humanos no es normal ni en los casos más extremos conocidos de comportamiento animal dentro del Régimen de Protección Especial de Animales Salvajes en Libertad Controlada, según fuentes oficiales.

Aunque es conocido el dicho “El hombre es un lobo para el hombre”, lo que ha venido a demostrar este suceso es que, a pesar de todos los esfuerzos de readaptación llevados a cabo por los diferentes organismos implicados, “El lobo es y seguirá siendo un lobo siempre” y eso sin ningún género de dudas.

Tomen pues buena nota las autoridades competentes en la materia y obren en consecuencia, como esperaría y espera cualquier ciudadano responsable.

Carmen Alonso Ibañéz

Los 3 cerditos y el lobo feroz presentan las candidaturas para las próximas elecciones municipales
El Diario de Marmoria 23 abril 2097

En la tarde de ayer en actos celebrados por los partidos: "El que parte, reparte y se queda con too...", "Da exactamente igual", "Menos dan las piedras" y "Devoraremos a quién se ponga por delante" fueron presentadas las candidaturas del cerdito violinista, el cerdito flautista, el cerdito práctico y el lobo feroz.

A las siete de la tarde en el pabellón del corral del tío Genaro, junto a la era, en asamblea celebrada por el partido “el que parte reparte y se queda con too…” se decidió que el cerdito Violinista fuera el candidato para la alcaldía de las próximas elecciones del 24 de mayo. El recién nombrado candidato en un encendido discurso prometió que mientras durara su mandato, a nadie le faltaría chocolate. A tal efecto, aseguró promover la construcción de una exquisita fábrica en forma de violín.

A las 19,15 en la cocina de la tía Basilisa la asamblea del partido “da exactamente igual” proclamó candidato al cerdito Flautista que en su discurso pausado y melodioso aseguró que durante su mandato a nadie le faltaría azúcar en el café del desayuno.

Por su parte en la plaza de la rueda rota junto a los pilones del tío Sinforoso, a las siete y media celebró su correspondiente asamblea el partido “menos dan las piedras”, quienes aclamaron como candidato al cerdito Práctico. En un medido y equilibrado discurso expuso su plan para convertir toda la carretera en un paso de cebra único, los asistentes acogieron la promesa entusiasmados con fuertes aplausos.

Finalmente en el callejón sin salida del barrizal de Pascasio tuvo lugar la asamblea del extremista partido “devoraremos a quien se ponga por delante” liderado por el siempre polémico lobo feroz, a quien aclamaron como candidato. Lobo feroz no hizo discurso se limitó a ensañar sus fauces y sus garras, a lo que sus partidarios correspondieron con aullidos salvajes, al finalizar el acto hubo duros enfrentamientos contra las fuerzas de orden con un resultado de doce heridos y trece detenidos.

Vicente M. Martín (cronista por oposición)


"Pinocho se va de casa"
Pinocho abandona de madrugada la vivienda en la que vivía con Gepetto, a toda prisa, con un maletín en la mano.
Revista: T.B.O.

Gepetto, cuando se levantó, encontró una escueta nota en su mesilla, en la que decía : "Estoy harto de que me crezca la nariz cada vez que se me escapa una mentira sin importancia, voy a al bosque en busca del hada, para que me perdone".
Apenas, hubo andado doscientos metros, en un claro del bosque, encontró un hada y le contó lo que deseaba le ocurriera. esta le hizo un conjuro, del cual Pinocho no entendió nada y le dijo muy clarito: "Pinocho, vete tranquilo, la nariz ya no te volverá a crecer".

De vuelta a casa, fue recibido por Gepetto con los brazos abiertos, y fueron pasando los días sin comentar nada de lo ocurrido.
Pero un buen día, ocurre lo que suele ocurrir, no se da importancia a las cosas y Pinocho comete un pequeño desliz, una pequeña mentira para salir a jugar, ! Ya he hecho los deberes!, no era verdad y salió a jugar con los amigos. Al día siguiente, notó algo raro en los pantalones, le apretaban un poco, no le dio importancia.
Las mentirijillas aumentaron en los siguientes días y para taparlas, se tuvo que poner la gabardina de Gepetto, en pleno mes de Agosto.
Pinocho, le contó a Gepetto, lo sucedido en el bosque y la conversación con el hada. Gepetto, se dio cuenta enseguida que no había hablado con el hada buena, eligió el hada de la mala leche, a la que debía encontrar inmediatamente para deshacer el hechizo.
Durante el tiempo que duro el hechizo, se le acercaban las niñas a Pinocho y le decían: " Anda Pinocho, miéntenos un poco".

Luis Iglesias


Brutalmante degollado en casa de una ancianaA la espera de que la anciana pueda declarar para esclarecer las circunstancias de la muerte.

Un brutal suceso ha teñido de sangre la mañana en la urbanización “El Bosque”. A las 6:00 del día de hoy, vecinos de la mencionada urbanización alertaban a la Guardia Civil de los fuertes gritos que salían del número 77, que despertaron a los propietarios de los chalets vecinos.

Cuando la Benemérita se personó en el domicilio, encontró un espectáculo dantesco. La víctima, identificada como Héctor hechos, un individuo armado con un hacha de gran tamaño, sin duda el arma homicida, que responde a las iniciales L.D.C. , de nacionalidad española. Junto a él, una joven que responde a las siglas C.R., vecina del número 4 de la misma urbanización. En el lugar en los hechos también se encontraba la propietaria del inmueble y abuela de C.R. , completamente cubierta de sangre, aunque ilesa, en estado catatónico.

En el bolso de C.R. fueron encontrados 123g. de cocaína y un total de 49 pastillas de diversas drogas de diseño. Al parcer C.R. y L.D.C. mantienen una relación sentimental.

No se descarta ninguna hipótesis y fuentes de la investigación confían en que la recuperación de la anciana ayude de forma determinante a esclarecer los hechos.

Para Finanzas & Sucesos, Diana del Bosque.

Miguel Ángel Pegarz


Ha aparecido un camino echo con migas de pan en medio del bosque.Algunos vecinos creen que es una vía para no perderse.
La voz de Galicia.

Se habla de una persona de poco más de metro y medio de altura que se llama Pulgarcito que ha ido dejando un camino echo con migas de pan en una ladera del bosque Frondoso, se piensa que algún animalito puede comerse las migas de pan. Hoy 24 de Octubre de 2014, varios vecinos se han acercado al lugar de los echos y han echo fotos de todo tipo.
Algunos decían tapar el camino con plástico para evitar la desaparición del camino.

Iria Costa


Un director de sucursal bancaria detenido por ser el “Lobo del cuento”

Tras intentar vender preferentes a la abuela, a la nieta y al leñador fue detenido cuando 20 de los 30 niños del cuento habían ya firmado la estafa.

Ramón López Lobo, empleado de banca y director de una céntrica sucursal segoviana fue detenido en la tarde de ayer cuando intentaba salir del país.

Todo comenzó cuando la señorita Roja, becaria de investigación en un laboratorio se acercó a concertar unas Letras del Tesoro, donde aumentar exiguamente su recortado y ya maltrecho salario. Un leñador de Balsaín que tenía la fea costumbre de poner la oreja donde no debía, fue la siguiente víctima.

El elemento más dramático de esta historia sucedió cuando la abuela, ante una llamada de su nieta acudió a la sucursal bancaria a depositar todos sus ahorros ante la perspectiva de ver multiplicado por cinco la inversión inicial. La señorita Roja Senior, cuando le preguntó para qué necesitaba la autorización de acceder a sus libretas de ahorro libremente, fue contestada por el señor Lobo con lo siguiente: “Es para que pueda verlo mejor, contárselo mejor, acercárselo mejor y todo para que pudiera ella gastarlo mejor”.

El imputado ha declinado realizar cualquier declaración a este medio, pero la señora De Feroz, a voces desde el portillo automático de su vivienda ha afirmado que todo es un complot contra su marido que había sido recientemente ascendido en la oficina y sus compañeros no podía soportar el éxito de éste provocando, debido a su envidia, su ruina.

El fiscal ha situado la fianza en unos irrisorios 30.000 € muy poca cosa según el señor Río, portavoz de Ausbanc (Asociación de Usuarios de Banca) teniendo en cuenta, las más de 5 cuentas bancarias encontradas en Suiza a nombre del detenido.

Chema García

Tirar del hilo

La sesión del lunes, 27 de abril, la dedicamos a los hilos. Con el título, "Tirar del hilo" (Historias de vida, amor y muerte) quisimos hacer una clara referencia a los hilos que tejen nuestra vida, nuestras historias y nuestra imaginación. Desde el hilo que nos conecta al vientre de la madre, el cordón umbilical, hasta el hilo que cortan las tres parcas que deciden nuestros destinos nuestra vida está tejida con hilos, visibles e invisibles, que anudan nuestros deseos, que se hacen una maraña en los momentos duros, que se tensan como la propia vida en ocasiones.
Por eso conviene, en la vida, la muerte y el amor, estar al hilo, enhebrar las palabras y seguir un buen patrón de costura para no dejar ningún hilván suelto.
Tomamos como referencia el libro "El hilo de la vida" de Davide Cali y Serge Bloch publicado en Ediciones B (Grupo Z) para descubrir, después, con qué colores tejemos nuestra memoria.




Propuesta de escritura: pensamos, en primer lugar, cinco palabras o cinco ideas asociadas al color rojo, ¿Es nuestro amor de ese color? ¿El rojo es el color de nuestros sueños? Otras cinco palabras con el rosa y otras cinco más con el naranja y el azul. Con esos cuatro hilos de colores y veinte palabras hilvanamos nuestra historia, la del que fuimos, la del que somos y la del que seremos. ¿Qué espero en el futuro?
Nos fuimos pasando una madeja con esos cuatro colores donde iban tejidas las historias. Nuestro compañero Andrés Santos hizo varias fotos. La Sala de Fondo Local se llenó de color:






Dejamos aquí un vídeo con el contenido del libro, texto e ilustraciones:



Y estos son los trabajos de algunos de los participantes en el taller de escritura creativa:


Billete de ida y vuelta

Fui el brote inesperado de un corte, una herida en el vientre de mi madre. Lo llaman cesárea. Miento, fui antes una aspiración, un plan, un deseo. Vuelvo a mentir, lo siento, lo hago por vocación. En realidad fui el consuelo ante la tristeza que provocó en mis padres un doloroso aborto. De lo contrario, nada. Ni los paseos en bicicleta, ni los castillos de arena, ni aquellas impúdicas miradas hacia los lazos que anudaban las coletas de las chicas en el colegio. De no ser por aquel aborto no habría podido combatir con furia las embestidas de mi hermano o acudir disfrazado de Superman al carnaval. Con los veinte, y no hablo de historia, llegó la época del jazz y de probar los labios de las muchachas al ritmo de Ellington o Davis. Sonando Caravan de fondo, reunía la fuerza suficiente para proponerles, con una sonrisa de idiota en el rostro, exóticos juegos (no confundir con eróticos, que también). Entonces vivir era como ponerse una máscara o jugar a la ruleta rusa sin miedo a perder. Pero me haré mayor, dice la biología, y habré de afrontar nuevos retos que, como le gusta recordarme al sabueso de mi padre, me exigirán abandonar la comodidad en la que me hallo instalado. En cualquier caso, conviene soñar y anticipar mentalmente el destino para que no sea éste el único que lo haga por nosotros. Os diré, por tanto, que me veo sentando en el banquillo de un gran equipo de baloncesto, enviando hombres a la cancha antes de que otros lo hagan a la guerra; entrenando pero también escribiendo, siempre a corazón abierto y sin renunciar nunca a mis creencias y principios; honrando con mis actos, y con mis letras, a aquel feto que renunció a nacer para que yo lo hiciera. Solo de esta manera, actuando con honestidad y sin olvidar nunca mi pasado, podré reconocerme en el espejo cuando asome, entre los visillos, el último atardecer; cuando a la hora pactada reciba la llamada de regreso a ese manantial del que un día partí, aunque entonces lo hiciera como un fino hilo de agua incapaz de saciar su propia sed. 

Juan José Nieto Lobato


Hilos de colores

Es un hilo rojo quien enreda el corazón
Quien palpita con la sangre
Quien regala sus hebras al huracán y al valle
Quien sueña con la libertad
Quien ata los cadalsos de un ayer oscuro…
Es la fuerza carmesí que bate los silencios
El sentimiento que graba su huella. Los recuerdos
Flecha que se hizo pasión
Anhelo depositado en una tierra sin asfalto…

Es un hilo naranja quien lava y marca la energía
Quien alimenta la mañana con su néctar
Quien al atardecer despide el día
Quien da la bienvenida a la noche
Quien espera en el árbol a ser amado…
Es el sueño de un futuro confuso
Balancín de pensamientos en reposo. Caminos
Cantos de sirenas que se pierden por el aire
Deseos atados…

Es un hilo azul quien adorna la existencia
Quien se refleja en el mar
Quien busca entre farolas mustias la belleza
Quien camina despacio y se admira
Quien corretea por los arroyos en busca de un rio
Es el beso de una estrella cuando amanece
Es un viento sereno
El tiempo que se enredó en los dedos

El color de las lágrimas en el suelo…

Es un hilo rosa quien adormece la noche
Quien deja su color entre las flores
Quien se cuelga en la sonrisa de los sueños
Quien espera al amor en el bordillo
Quien despide en la estación a los viajeros…
¿Es un hilo rosa el silencio?
Tú eres rosa
Él es rosa
Yo soy rosa…

Vicente Martín


Sopa  de  Calabaza

Nací poco después de que los doctores aseguraran a mi madre que no volvería a serlo. Fue un parto difícil. La matrona no era capaz de convencerme de que fuera de aquel globo de agua, existía otro igual de calentito y mucho más grande. Tuvieron que obligarme. Cuando estuve fuera, más que rosa, era morada. Me faltaba oxígeno. Un rosario de azotes fue mi bienvenida. Lloré y cuando lo hice, alguien dijo: "Está bien" y me pusieron encima de un balón sin aire. Escuché el tambor que conocía, mi desgarro cesó. Besos y caricias se enredaron. El  cordón de plata se volvió a tejer. Me dormí y volé
Mi sexo fue un inconveniente. Una epidemia de varoncitos me precedía. Tras mi alumbramiento, continuó. Fui una rareza.
Mi abuela materna, que era una meiga vieja, al ver las marcas naranjas de mi brazo izquierdo, sin solemnidad, pero con firmeza, decidió nombrarme su sucesora. Estoy segura de que si no las hubiera tenido, se habría inventado cualquier otra cosa para cederme su cetro: su escoba.
Crecí entre tétricas homilías rojas y sopas de calabaza que olían a carroza: las cocinaban por igual fantasmas, murciélagos o princesas, la santa compaña, la sirenita o caperucita roja.
Mi primera pérdida fue un diente. Lo taló una fresa. A la mañana siguiente, bajo mi almohada, encontré una moneda. "Es mágica -dijeron- Si sigues sonriendo, te crecerá otro mucho más blanco y muchísimo más fuerte. La trajo Pepito Pérez, un minúsculo roedor azul, que vive en el hueco de las paredes lejanas de un castillo de leche". Pronto tuve tres más. Las guardé. Tenía un plan: mi abuela volvería a tener dientes.
Ese mismo verano, la vendimia trajo el  vino flojo de todos los años y un miedo nuevo e intenso: el fuego. La montaña ardió. Sus larguísimos dedos dejaron de acariciar el cielo. No hubo clemencia. La risa fresca dio paso al duelo. Escondí tres castañas en el suelo. Mi abuelo, que era un hombre muy severo, me vio. "Cuando las puertas del infierno se abren, el primero que sale es un perro de tres cabezas. Se viste de lobo. Una procesión de muertos es su cortejo. Toman todos los caminos. Soplan fuerte. Nada se mantiene. Ningún leñador fornido puede vencerles. Las caperuzas de los inocentes confunden su color con las llamas. Las casas se desmoronan. La batalla convierte a unos en ogros hambrientos, a otros en peones crueles. No hay salida. Solo el aliento de un hada tierna  puede disipar las brasas y llenar de vida la montaña." -Eso dijo-
Recé toda la noche. Prometí ser obediente y no hacer mas trastadas, dejar la cama hecha, recoger la habitación  y comer y beber lo que fuera aunque se tratara de  alubias, espinacas o fanta. Me pareció un cambio justo. Lo único que en ese momento importaba, era que la hechicera -que yo imaginé blanca- borrara con delicadeza la desgracia. No me escuchó, al menos eso creí hasta que dos días después,  mi abuela me llevó a la cuadra. La cerda había tenido una camada. Once lechoncitos rosas mamaban. Eran preciosos. La gorrina que les alimentaba se llamaba Hada.
Cumplí mi promesa al menos durante tres siglos  o una semana. Me vestí de rosa para que no se me olvidara. Fui una cenicienta voluntaria. Si cumplía mi palabra, el mundo giraba. Hasta que un día, mientras la peonza rosada bailaba, me pinchó un beso. Caí en un sueño profundo. La madreselva se enredó en mi cama y tejió el maleficio del que nadie escapa. Despareció el horizonte. Se secó el mar. La cometa se hizo polvo naranja. Todas las margaritas fueron mutiladas. Sus restos sepultaron a la barredera que me velaba.
En un viaje astral, conocí a un Dalay Lama. Estaba calvo y vestía de naranja. Me invitó a comer una hierba muy amarga. Yo acepté. Poco después vomité sobre él. No se inmutó.

Cuando ya no me quedaba nada dentro, me acomodó en un loto y me enseñó un mantra: " La vida es el camino que se teje en una sopa de calabaza. Poco importa que la puntada sea el pespunte de una guadaña. Solo el eco de un veneno que se anuda alrededor de unas mamas, seca para siempre la montaña ".
Me  vestí de azucena. Con las margaritas deshojadas cosí una barca, con los restos de una naranja bordé una vela: una cometa mostaza. Con la escoba, golpeé el mar. Volvió a llenarse de agua. Desde entonces navego entre lanas.
Ayer, una lámpara se enganchó en la madeja que ovillaba. Era una vasija de hojalata con la boca en forma de embudo. Una aceitera chata con las aristas cubiertas de orín . La eché un poco de ginebra -es buena para los metales- y la froté con la toallita azul con la que limpio las gafas.  Dentro vivía un genio grande y rojo como la lava. "Te concedo tres deseos por sacarme de esa jaula" -dijo-. Era una trampa.
La lancé lejos. El océano hirvió. Una serpiente gigantesca abandonó  el abismo. Su cuerpo se deslizó por la superficie. Ocultó el sol. Mas de un millón de nudos rodearon mi navío. Me miró  fijamente con sus trescientos ojos. Estaba furiosa. En sus pupilas vi caravanas de esclavos. Todos tenían tres grilletes anudados a su garganta y una lámpara en sus manos. Un becerro de oro les marcaba el paso.  El reptil abrió sus fauces. No llamé al mago. No supliqué vivir. Con un  movimiento preciso, se desenredó y su lengua bífida asió al nigromante y lo encerró en la alcuza de  lata. Luego desapareció. Una escarcha de lentejuelas y escamas fosforescentes fue su horrible huella. 
No tardé mucho en izar anclas. El viento era suave. Se infló el volantín y me dejé llevar. La mar estaba en calma.
Hoy la luna ha visto como tejía sin descanso en el humo de mi sopa. Es un bordado sencillo, un cielo azul y rosa, una parra llena de cometas, y dos mecedoras. Aunque está todo hecho, queda mucho por hacer. He marcado el rumbo. El timón, como podéis imaginar,  lo lleva mi escoba.

Ana Isabel Fariña


Vida y muerte enamoradas

Nace el tiempo
con un cálido deseo:
vida y luz,
disfraces del pensamiento.
Los días desgarran mi libertad
con un gesto despeinado.
Busco palabras
vestidas de perfume,
para vivir retazos de mi ser.
Los años yacen
trenzados de pasión.
Con mi ritmo,
hilo la mirada
en el sentir del otro.
El presente aflora los recuerdos,
pincelado de cielo,
sumergido en mis pasos.
Atardece el amor
en el latir de los años,
quebrado por la piel
que muere en el silencio.

Sofía Montero García


El hilo de la vida

Me desperté y la cama estaba llena de pétalos de rosas rojas.
Pensé en ti y en tus cálidas palabras aquella tarde de Lunes lluvioso.
Me recordaba a Galicia en sus días tristes cuando observabas el mar y se perdían millones de recuerdos en tan solo y como sería cuando te conocí.
Millones de cartas, millones y millones de caricias.
Bajo el fuego empecé un libro donde venían millones de historias que contar. Era algo realmente fascinante.
El día de San Valentín dibujaste un corazón que tus preciosos labios besaron, nadie me ha echo un regalo así de emocionante y precioso.
Cuando iba por los canales de Holanda me recordaba a Venecia y el color Aquamarina.
También sentí dolor cuando se murió mi periquito Mar al que tanto quise.
Dolor cuando sentí la pérdida de Rosa, aquella abuelita que marcó mis prácticas como Paz.
Me encanta el silencio del atardecer en el arroyo, aquel emotivo día que cogí a mi tortuga. Mi mejor amiga, sin duda.
Acabé agotada de 2- 3 clases dirigidas del gimnasio donde estrené mis nuevas zapatillas rosas y donde aprendí los pasos del Body Combat.
Compré aquella camisa vaquera por un cumpleaños.
La naturaleza siempre me ha dado todo lo que deseo: la calma de intensos campos de amapola y colza.

Iria Costa


El hilo de la vida

Solo conocí lo que es el verdadero amor cuando ya fui lo bastante mayor como para apreciarlo.
En mi casa las comidas estaban llenas de risas. Todo eran codazos y miradas disimuladas y mi padre nos reñía continuamente.
Cuando íbamos al campo disfrutaba del aire que acariciaba mi rostro, del cielo y de las flores. Mis manos se llenaban de ellas y de su aroma.
Mi madre me peinaba y me ponía una cinta de pelo de color rosa para ir al colegio.
Un día me caí y sentí mucho dolor en las rodillas. La sangre roja me asustó y mi madre me consoló besándome con unos labios pintados que eran de un color rojo más vivo e intenso todavía.
Cuando llegaban las Ferias, mi padre nos llevaba y nos compraba una enorme nube rosa de algodón dulce a cada uno.
Recuerdo que la primera vez que ví el mar tenía 14 años y fue allí donde viví aquella intensidad naranja del sol antes de empezar a despegarse del horizonte.
Me gusta poner en mi cama sábanas azules porque me evocan gestos de ternura y cariño.
Me he comprado un vestido nuevo y unos zapatos rojos para salir las noches de luna llena.
Ahora que lo sé, disfruto todo lo que puedo con los buenos amigos. Y me encanta compartir con ellos risas, cariño, amor y mi pasión por la vida. Espero que me siga quedando mucho ovillo para seguir tirando y descubrir todos los colores del arco iris y otros inventados, y que cuando me abrace la muerte, el color sea blanco brillante, de serenidad.

Carmen Alonso


El arco iris de la vida

Me han contado que nací en un país donde las montañas eran altas, los prados verdes y la nieve blanquísima que llegaba hasta las rodillas.
Me han contado que nací el año en que el hambre, la miseria, la censura y el terror acabó en el lugar, donde yo debería haber nacido, un soleado, para muchos, 20 de noviembre. Aunque todavía quedara mucho por hacer…
Todo eso, y más, me han contado. Sin embargo, los primeros recuerdos que tengo del arco iris de mi vida están aquí, en este país, y vienen hacia mí como flashes desordenados.
Mi infancia se tiñe de varios colores:
El rosa intenso de las sabrosísimas fresas que recogía en el huerto con la abuela. No he vuelto a probar unas fresas tan exquisitas.
El rosa pálido de los jamones, los palotes, los pastelitos de la Pantera Rosa y los Frigo Pie que me comía y compartía, entre risas, con los amigos.
Y también el color de los cerdos que alimentábamos durante un año y que con el frío se acercaba su final. El rosa se teñía entonces de un gris momentáneo al escuchar sus gritos atemorizantes y ver sus cuerpos chamuscados. Pero volvía rápidamente el rosa, cuando veía esas majestuosas matanzas en las que estaba rodeada de gente de la familia, y no tan familiares; muchas de esas personas ya no están, al igual que tampoco están esas tradiciones que no volverán ya a formar parte de nuestras vidas. Ese mismo día, en la chimenea, se difuminaban varios tonos naranjas dentro de la nerviosa llama que nos calentaba y nos hacía olvidar el frío de ese diciembre, en el que todos un poco, nos volvíamos, aunque no sin orgullo, un poco asesinos.
Y también me vienen a la memoria, Raquítico y Obeso, esos dos peces que daban vueltas sin parar en la pecera y huían despavoridos, no sabemos adónde, al entrar alguien en el salón. Pienso que Obeso era egoísta y le robaba la comida a Raquítico quien se alimentaba lo necesario para subsistir.
El gris del colegio, el rechazo y las risas de los niños se convertían en el rosa de los libros de la biblioteca a la que acudíamos una vez a la semana.
Y así, entre libro y libro, fui caminando hacia la adolescencia, a la etapa del color rojo, también chapurreado con el gris. El rojo del amor, de la pasión, de los bombones Nestlé, de los primeros besos, de las rosas… y de sus grises espinas, del desamor, de la tristeza, de la amistad traicionada, de las azules lágrimas y también de los príncipes azules quienes, al contrario de lo que ocurre en los cuentos de hadas, se convierten en repugnantes sapos verdes. Unos más repugnantes que otros, claro.
En el presente todavía fluyen, de vez en cuando, las amargas lágrimas de la muerte de la persona que años atrás me llevó a su huerto a recoger y comer esas tan añoradas fresas, recuerdo más querido e intenso de la infancia. Siento también el azul del mar con su rumor y sus olas de espuma blanca de las vacaciones que se juntan, horas después, con el múltiple colorido anaranjado del atardecer en Cabo Trafalgar. La tranquilidad conseguida tras años de doloroso esfuerzo y el color de los zumos que, día a día, bebe Lucía, la niña de mis ojos, a la hora de la comida.
Me gustaría que el futuro fuera un arco iris de luces y sombras, donde las sombras, que siempre estarán presentes, no lo dudo, no sean muy oscuras y den rápidamente paso a luminosas luces que me acompañen en mi camino. Un camino donde la claridad ayude a conseguir los, todavía, inacabados sueños y en el que Lucía, el amor de mi vida, luzca de la misma forma que el sol reflejado en el Océano Atlántico a la hora de la siesta.

Toñi Martín del Rey